Al "Xtremo" mala.
Max (Teo García), un sicario, prepara su venganza luego de que la noche en que planeaba iniciar una nueva vida con su hijo todo le fuera arrebatado. Sí, así de original y los problemas no paran ahí.
"Xtremo" no sabe ni qué es ni qué quiere, bueno, corrijo, lo único que sabe es que quiere muchas peleas, balazos y sangre. Prácticamente a eso se reduce la película que es desordenada, al principio no se sabe de quién va, si de Max, de Lucero (el antagonista que cae en la caricatura y que corre por cuenta de Óscar Jaenada) o de Leo (un muy carismático Óscar Casas), un joven que acaba involucrado.
Luego está el hecho de que en realidad no dice nada nuevo de la venganza y tampoco la utiliza para hablar de algo más. Pareciera querer hacerlo del poder, de la venganza, la familia e, incluso de la paternidad. Ello explica los momentos que sugieren cambiará de enfoque y que Max se convertirá en maestro de Leo, pero no. Y claro, tampoco hay que olvidar sus ambiciosas auto comparaciones con "Gladiador", donde un padre también venga a su familia, la cuestión está en que aquél interesaba, en ésta, uno de sus problemas más graves es que llega un momento en el que a uno lo único que le interesa es que acabe y eso, eso en en "xtremo" grave.
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España 2021 - 1h 51m
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