Paul Thomas Anderson se pone melancólico y soñador.
"Licorice Pizza" es una experiencia sencilla y retro en la mejor combiación posible. En ella Anderson, inspirado por un "Día de la foto" que vio en 2001 y por la historia de Gary Goetzman, un niño actor de los 60's, escribió la historia de Gary Valentine (Cooper Hoffman), un quinceañero, que conoce a Alana Kane, asistente de un fotógrafo en el mencionado día. De ahí comienzan una relación definida por la diferencia de edades (una década) que incluye aspectos profesionales, admiración entre ellos, mucho coqueteo de parte de él y mucha resistencia de parte de ella.
En "Licorice Pizza" priva ese sentido de esperanza, ilusión, picardía, deseos de vivir y experimentar, en el sentido sano e inocente de la adolescencia y acentuado por el aire de posibilidad de la época, los 70's. La pareja protagónica es un descubrimiento. Tanto Cooper Hoffman como Alana Haim hacen su debut en la pantalla grande. Hoffman es hijo de Philip Seymour Hoffman, actor con quién Anderson colaboró en filmes como "Magnolia" y "Boogie Nights". Haim es una cantante y a quién Anderson tuvo en mente desde que escribió el guion. Por cierto, los miembros de la familia de Kane (padres y hermanas) con interpretados por miembros reales de la familia de Haim. La combinación se agradece por su frescura y naturalidad (hay dos estrellas en potencia aquí), por traer a pantalla a una dupla que se escapa de los cánones de belleza típicos de Hollywood. Él es ligeramente regordete; ella tiene una nariz "muy judía" (como le dicen en la misma película), pero todos entendemos el encanto que tiene cada uno. Ésta es una historia de gente real.
Haim y Hoffman están cobijados por un gran elenco. En especial hay que mencionar a Sean Penn como Jack Holden, personaje inspirado en William Holden, actor y estrella del cine en los 50's, quién ve potencial en Alana, pero está más ocupado en su nuevo proyecto, y Badley Cooper como Jon Peters. Peters fue un productor de la época y novio de Barbra Streisand. Cooper está fantástico en el personaje, tanto que con muy poco tiempo en pantalla se le rumoraba como un posible nominado al Oscar dado que otras premiaciones lo incluyeron como los SAG (Premio del Sindicato de Actores) en la categoría de reparto.
"Licorice Pizza", cuyo nombre responde, por cierto, al de una cadena de pizzas de la época que irónicamente no aparecen en la trama, pero cuyo espíritu la representa muy bien, está nominada al Oscar como Mejor Película, Director y Guion Original. Es posible que a algunos les pareza simple, pero ése es su encanto. Es un viaje al pasado, una mirada melancólica a la adolescencia como ese periodo donde se tiene hambre de crecer y experimentar, a los amores platónicos, dónde se busca un lugar en el qué encajar y dónde ninguno pareciera ser el adecuado. Anderson atina enormemente con un filme con una historia real que habla tanto de los retos de Gary como de los de Alana, que no se olvida de tocar lo controversial de la diferencia de edades, máxime que hay un adulto entre ellos, pero que no se enfrasca en ello y que lo supera centrándose en sus motivaciones y, sobre todo, en sus carencias y necesidades. Esta es una historia de amor en el mejor sentido de lo inocente y esperanzador. Es un inicio.
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EE. UU. 2021 - 2h 13m
