Mucho ruido y pocas nueces es la mejor manera de describir esta película que, en un convulso Los Ángeles de un futuro próximo, cuenta la historia de una enfermera y el hospital que administra: uno para criminales. El filme pretende ser un thriller, pero a pesar de su reparto y una fotografía "sofisticada" nunca consigue despegar. Es Jodie Foster la que sostiene una trama que se las da de sofisticada y metafórica cuando no es más que predecible. 🎬🎬
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