Aunque dispareja, esta película debe de ser vista. Retrata los intereses y políticas detrás de los esfuerzos por salvar a la tripulación del Kursk, un submarino, que terminó hundido en el mar Barents en agosto de 2000. El filme construye muy bien la entrega y camaradería de los marinos, así como las incongruencias del gobierno ruso y las consecuencias en sus familias. El cine tiene una función de denuncia y esta película hace muy bien en destacar que el compromiso del pueblo con su gobierno debe ser recíproco. 🎬🎬🎬
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