No lo sé... no lo sé...
Vamos a ser claros, Netflix necesita una comedia romántica que susituya a "El stand de los besos" y "A todos los chicos de los que me enamoré", dos de sus títulos juveniles más exitosos y que dieron por resultado trilogías y "A mi altura" parace ser, con más de 41 millones de vistas en Netflix a un mes de su estreno, la opción más obvia. La secuela empieza meses después con un nuevo ciclo escolar donde ahora Jodi (Ava Michelle) es la chica popular. Mientras disfruta y asimila su nuevo estatus decide salir de su zona de comfort y participar en el musical que se prepara en su escuela. El nuevo reto y las expectativas la pondrán en crisis al igual que a su relación con Dunkleman (Griffin Gluck).
La primera duda que salta es si realmente necesitábamos una secuela. Y es que "A mi altura 2" tiene sus aciertos, pero tampoco es que sea especialmente innovadora o que hago algo por llevarla a "otras alturas". A su favor tiene el que intenta explorar cómo un evento como el que cierra el primer filme y dónde Jodi se sincera, habla de las burlas que recibe y de cómo "es así" y "así se acepta", no es suficiente para cambiarla de un día a otro. Eso se agradece. También se le agradece el que intente ampliar el exprectro alrededor de su discurso sobre cómo todos tenemos inseguridades y para lo cual incluye a Jan Luis Castellanos ("13 Reasons Why") como Tommy, quién fuera un niño con sobrepeso y que además sirve como tercero en discordia. Por último, en esta ocasión, la película se ocupa más de personajes secundarios. Por ejemplo, vemos más de Harper (Sabrina Carpenter), hermana de Jodi y quién ahora busca mostrar que es más que una reina de belleza, de Fareeda (Anjelika Washington), buscando dejar su huella como diseñadora de moda, de Stig (Luke Eisner), ya no como el chico popular e intentando superar su miedo al público, y hasta de Kimmy (Clara Wilsey), némesis de Jodi que enfrenta el ya no ser el centro de atención.
La cuestión está en que entre todas sus buenas intenciones, "A mi altura" no termina de tratrar ni desarrollar adecuadamente el conflicto de Jodi ni de nadie más. Todo se lleva por la superficie y se resuelve fácil. La verdad es que funcionaría mucho mejor si en lugar de una segunda película se hubiera hecho una serie al estilo "Sex Education", pero con un enfoque en aquello que nos hace únicos, pero que también nos hace sentir que no encajamos (estatura, peso, color de piel o cualquier otro). Tendría el tiempo que le falta para verdaderamente decir algo sobre el tema.
Ahora, ¿qué si es entretenida? Si, lo es y en gran medida se pasa rápido, tiene sus momentos divertidos, otros que no hacen tanto sentido y, bueno, Ava Michelle es una actriz carismática. Así que no está ni de lejos a la altura de clásicos del genero, pero tampoco dista mucho de los niveles que le dejaron sus antecesoras de plataforma. Es lo que es y si eso es bueno o malo probablemente es una cuestión de perspectivas.
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EE. UU. 2022 - 1h 37m
