top of page
Foto del escritorCarlos Andrés Mendiola

Trainspotting, la vida en el abismo

La vida de los adictos es la vida en el abismo. Es una vida de pocos consuelos, intensas, pero pasajeras diversiones y camarería entre otros practicantes. Una vida de agendas secretas y de prioridades distintas.



“Trainspotting”, basada en la novela Irvine Welsh, es una rareza y una obra que sólo pudo haber surgido del cine independiente. Presentada fuera de competencia en el Festival de Cannes, “Trainspotting” hace una poco convencional radiografía de la adicción al contar la historia de Renton (Ewan McGregor) y su grupo de amigos: Spud (Ewen Bremner), quien busca trabajo, pero enfrenta las entrevistas de maneras nada ortodoxas; Sick Boy (Jonny Lee Miller) que teoriza constantemente sobre Sean Connery; Tommy (Kevin McKidd) que deja y retoma las drogas, y Begbie (Robert Carlyle) un sicótico.


El mérito de “Trainspotting” está en la forma en como retrata al grupo de adictos. El filme ha sido alabado por quienes consideran que condena el uso de drogas y criticando por quienes creen que lo promueve. Lo cierto es que no intenta hacer ninguna de las dos. Danny Boyle busca y consigue mostrar la brutal, escandalosa y hasta cómica vida de los adictos sin caer en la exaltación ni en moralismos o juicios. “Trainspotting” muestra los altos y bajos, los absurdos, ironías, satisfacciones y malos sabores de los adictos. Como Renton, quien tras romper un periodo de sobriedad, declara, es ‘maravilloso’. Y no hay duda, seguro lo hacen sentir bien, como también es claro que se siente mal el resto del tiempo. El filme simplemente lo muestra en todo su surrealismo y crudeza.


Nominada al Oscar por Mejor Guion Adaptado y ganadora del Premio Empire como Mejor Película Mejor Director, Mejor Actor (McGregor) y Mejor Debutante (Bremmer), “Trainspotting” es, además de una obra paradigmática de finales del milenio, el filme que catapultó a dos talentos: el director inglés Danny Boyle y el actor irlandés Ewan McGregor. El primero dio muestras de su talento para construir historias y dirigir actores, y el segundo de su capacidad para transformarse, interpretar y encarnar personajes. Boyle se ha convertido en un director multifacético, ha explorado la ciencia ficción (“Sunshine, aleta solar”, 2007), el terror (“Exterminio”, 2002) y recientemente la entrañable ganadora del Oscar, “Quisiera ser millonario” (2008), mientras que McGreggor ha trabajado en otras cintas de corte independiente (“El libro de cabecera”, 1996 y “El umbral”, 2005) y en grandes superproducción como “Star Wars: el ataque de los clones” (2001) y “La Isla” (2005).

Un adicto sólo puede ser entendido por otro adicto. Sólo él puede entender la urgencia, el humor y la desesperación. En el tren de la adicción al menos hay compañía, y en ese sentido, “Trainspotting” es, además de un filme sobre drogas y dependencia, uno sobre amistad. Al menos en la vida en al abismo hay compañía.

Trainspotting

Inglaterra 1996

Director: Danny Boyle.

Reparto: Ewan McGregor, Ewen Bremner, Johny Lee Miller, Kevin McKidd, Kelly Macdonald, Robert Carlyle.

2 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

Comments


bottom of page