"Préstame tus ojos" de Gary Aurebach

Te los regalo... no los quiero.

Hay malo y luego está "Préstame tus ojos". Es un thriller latino donde Alejandra (Elyfer Torres), una joven invidente recurre a ayuda vía telefónica para que le "presten sus ojos" viendo a través de la cámara. La voluntaria es Jael (Hunter King), quién sufre de agorafobia (temor a los espacios públicos o abiertos) y debe evitar que Alejandra caiga víctima de unos asesinos.

La idea o premisa base de "Préstame tus ojos" es buena: una persona que ver por otra a través de un dispositivo en medio de una situación de vida o muerte; daría para un gran thriller o filme de terror. El problema está en que ni un guion ni una película se sostienen sólo de una idea y "Préstame tus ojos" no sabe qué hacer con ella. Es claro que no se hizo investigación sobre personas con ceguera y que tampoco se tiene sentido común.

Por ejemplo, hace poco estrenó la serie "La luz que no puedes ver" donde la protagonista es también ciega. En aquélla la protagonista carece de vista, pero no de sentido común. Sabe cómo moverse, cómo orientarse y así como ella, se supone, Alejandra ha sido instruida para ser independiente. Alejandra grita a la menor provocación, alertando a sus atacantes. ¿En serio? Es un error de principiante que le resta todo sentido. A Elyfer Torres, conocida por ser la protagonista de "Betty en Nueva York", le faltó entrenamiento y capacitación. A su Alejandra se le olvida de vez en vez su condición... y ve. No es el único problema.

"Préstame tus ojos" es un thriller y uno de acción... o al menos eso pretende y es que, así como Elyfer Torres pretende no ver, el filme pretende ser interesante y causar suspenso, pero aquí no aplica aquello de "fake it till you make it" o "inténtalo hasta que lo consigas". Nunca lo consigue. El suspenso es nulo a pesar del esfuerzo de Hunter King por reaccionar y mostrarse angustiada por lo que mira y lo que puede suceder. Las peleas de acción son de chiste, con actores que brincan y cuya labor coreográfica es nula. La cámara está mal colocada, dejando ver "el truco" y la edición tampoco hace nada por darle ritmo y crear suspenso.

Mauricio Ochmann aparece al centro del póster de "Préstame tus ojos". Es también una mentira y un recurso de click bait. Ochmann hace a Juan, el protector de Alejandra, pero quién la deja al inicio de cinta para intentar detener la amenaza (que claramente no sucede). De ahí vuelve a aparecer hasta el final en un desenlace que parecería sugerir, para mayor ironía del "no ver", una secuela.

A "Préstame tus ojos" no hay que prestarle ni los ojos, ni un clic, ni un segundo, ni nada... vaya, de prestárselos más valdría regalárselos porque ante eso, ante lo que habría que ver, es mejor no ver nada.

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EE. UU. 2023 - 1h 28m