top of page

El silencio de los inocentes

“Me gustaría quedarme más tiempo, pero tengo a un viejo amigo para cenar,” Hannibal Lecter

Brillante, escalofriante, perturbadora y a la vez cautivante.



Clarice Starling (Jodie Foster) es una joven e inteligente agente del FBI enviada por su supervisor a entrevistar al astuto asesino serial Hannibal Lecter (Anthony Hopkins), pues se cree que puede ayudar a encontrar a Búfalo Bill (Ted Levine), el secuestrador de la hija de una senadora. Sin embargo, la entrevista no se restringe a convencionalismos. Lecter exige un intercambio. Él, intrigado por la agente, tiene el derecho de cuestionarla. A cambio contestará lo que ella quiera, aunque eso no signifique en ninguno de los casos respuestas directas. El verdadero significado deberá leerse entre líneas. El reloj sigue corriendo al tiempo que entre el prisionero y la agente se establece una conexión. Las piezas del rompecabezas están sobre la mesa. El armarlo no aclarará todas las preguntas.


Basada en la novela homónima de Thomas Harris, “El silencio de los inocentes” representa la segunda aparición de uno de los personajes más fascinantes que ha dado la cinematografía, Hannibal Lecter. El doctor seduce a la audiencia en cada una de sus apariciones. A pesar de la maldad que se esconde en él, nadie puede escapar a su carisma, ingenio, clase... y desde luego a su apetito. El trabajo de Hopkins le valió un premio de la Academia como Mejor Actor por tan sólo 30 minutos en pantalla. La cinta, Demme, Foster y el guion también fueron reconocidos.


Foster es precisamente el hilo conductor de la historia; la protagonista, quien con su vulnerabilidad, fuerza y astucia representa lo opuesto de Lecter. Un opuesto que es en el interior una especie de espejo, que refleja el pasado, alumbra el presente y enturbia el futuro. Un espejo que muestra las similitudes y que hurga en los caminos de la transformación, la liberación y la destrucción.


Ubicada en el número 65 de la lista de las 100 Mejores Películas del American Film Institute, “El silencio de los inocentes” es el regreso y consagración de Lecter tras la fallida “Manhunter” en los 80’s. Su historia continuará en “Hannibal” (2001) y regresaría en “Dragón Rojo” (2003), novela en la que se basara originalmente “Manhunter”.


“El silencio de los inocentes” es una de esas joyas cinematográficas que atrapan al espectador al enfrentarlo a personajes vulnerables, maliciosos y astutos. El temor está presente desde la primera escena. Algo falta. Algo pasa. Algo no se dice. Hay algo en ese silencio, en ese interior. Algo perverso, que asusta, atrapa... Algo que se siente en el ambiente, que se huele, que impacta... Algo que se intercambia con inocencia…

The Silence of The Lambs

EE. UU. 1991

Director: Jonathan Demme.

Reparto: Anthony Hopkins, Jodie Foster, Scott Glenn y Ted Levine.

Artículo inicialmente publicado en el periódico estudiantil “La Catarina” de la Universidad de las Américas-Puebla. Derechos Reservados de Carlos Andrés Mendiola H.

11 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page