Carlos Andrés Mendiola

18 de nov de 20235 min.

"Los juegos del hambre: Balada de pájaros cantores y serpientes" de Francis Lawrence

"La nieve (Snow) siempre cae arriba," frase recurrente entre la familia Snow.

"Los juegos del hambre" han vuelto.

En la década pasada "Los juegos del hambre" se convirtieron en uno de los éxitos principales de la ola de novelas juveniles de corte distópico que llegaron a la pantalla grande y entre las que estuvieron también "Maze Runner" o "Divergente". Las tres novelas se convirtieron en cuatro películas y recaudaron cerca de tres billones de dólares, haciendo también en el proceso una estrella de Jennifer Lawrence. "Balada de pájaros cantores" es una precuela. Se publicó en 2020 y se centra en quién fuera el antagonista, Coriolanus Snow.

64 años antes de "Los juegos del hambre", Snow (Tom Blyth), tiene 18 , vive en una situación precaria que oculta y busca recuperar la gloria previa de su familia. Ve la oportunidad en una beca-premio por la que ha trabajado y que parece escapársele de nuevo cuando las reglas cambian. Ahora, para conseguirla, deberá ser mentor y conseguir el éxito en los décimos juegos siendo mentor de Lucy Gray (Rachel Zegler), la representante del distrito doce.

"Balada de pájaros cantores y serpientes" es una adaptación fiel. Presenta la historia en tres partes que son básicamente los tres actos y que muestran la progresión de Snow de un estudiante a mentor y luego a guardián de la paz. Prácticamente lo único que deja fuera la película es un poco más de elaboración de subtramas y, en especial, los antecedentes y la dinámica de vida de Lucy Grey. Es una novela larga, de 517 páginas, que resulta en una película un poco más larga de lo habitual, pero cuyo ritmo no decae, cambia.

Hay dos elementos que se notan a primera instancia cuando inicia "Balada de pájaros cantores": Panem es distinto, está recuperándose de la revolución, y la mano que teje todo conoce el universo. Francis Lawrence, responsable de las últimas tres películas de "Los juegos del hambre" está de nuevo a cargo. Su selección de Tom Blyth como Coriolanus Snow es un gran acierto. Blyth tiene una carrera joven, pero es perfecto para el personaje, aunque quizás no la primera selección para muchos. Es castaño y aquí tiene teñido el cabello de rubio casi blanco... como la nieve. Es muy delgado y ello puede percibirse como vulnerabilidad, pero no es así. Hay gran fuerza y voluntad en él y Blyth se la da, costruyendo un viaje del héroe que en realidad es el viaje del villano y que ve justo su inseguridad transformarse a base de determinación. Gran trabajo también del equipo de diseño de imagen. Literalmente el cambio de Snow puede verse en su cabello: de una melena ondulada y algo larga a un buzz cut y terminando en un alto copete.

La contraparte la pone Rachel Zegler como Lucy Grey, quién, al parecer, finalmente obtiene el personaje que la hará una figura. Zegler debutó en "Amor sin barreras" y luego tuvo un rol central en "¡Shazam! La furia de los dioses", lo siguiente será como "Blanca Nieves" en el live action. Zegler es un talento. Tiene una cualidad similar a Blyth en tanto al aplomo y la voluntad que le imprime a su personaje, pero ello proviene de un lugar disinto. Lucy Gray se las ha ingeniado para sobrevivir. Es artista y el show le es innato. El talento vocal de Zegler luce aquí también. En la novela aparecen varias canciones que aquí cobran vida con arreglos country y que se convierten en leit motives y casi en mantras.

Este regreso a Panem funciona tanto para quiénes no conocen nada la historia o la diámica general como para quiénes lo hacen. Es, más disfrutable, para los segundos pues hay referencias y conexiones. La experiencia es distinta por dos aspectos que es vital comprender y que son la causa de división de opiniones entre críticos y público. El primero tiene que ver con la estructura dramática. En las historias iniciales el arco narrativo se construye alrededor de los juegos, por lo que el momento previo a que alguien resulte vencedor es el clímax. Aquí es distinto, ése momento está, pero es un falso clímax. El real está después y ello tiene que ver con el otro aspecto: el protagonista. Lucy Grey tiene un rol central y es la protagonista femenina, pero la historia es de Coriolanus Snow. Entonces, hay un tercer acto que ve al personaje caer en desgracia, intentar salir de ella y finalmente ceder a su "lado oscuro". Esto es esencial de comprender. El héroe no termina en un mejor lugar moral, no es una mejor personaje, pero sí consigue su objetivo.

Dicha estructura no es del todo esperada ni placentera, pero justo es el punto de "Balada de pájaros cantores y serpientes". El filme construye a lo largo de la historia que Los juegos del hambre no sólo se juegan dentro de la arena, sino también fuera de ella (y lo vemos). Viola Davis hace a la doctora Volumnia Goul, la antagonista y responsable de los juegos, y le pregunta a Snow: "¿por qué existen Los juegos del hambre?" La respuesta de Snow cambia porque finalmente lo entiende, porque ha visto el precio que se paga y el espejo que son, porque él ha cambiado también y porque ve al mundo de manera distinta. Está Lucy Grey, con quién establece una relación que coquetea en lo romántico, pero que no puede escapar a la desconfianza y que está condenada por ello. Está lo que sucede con Casca Highbottom (Peter Dinklage), decano de la Academia y uno de los creadores de "los juegos" y que desea nunca se le hubiera ocurrido. Está Sejanus Plinth (Josh Andrés Rivera), hijo de un poderoso miembro del capitolio y amigo de Snow, quién proviene del distrito 2, ha visto otro lado de la vida y se atormenta por su existencia y la desigualdad que existe.

Los juegos del hambre de "Balada de pájaros cantores y serpientes" no son los de "Los juegos del hambre". Están como un castigo, aún no como el reality show en que se convertirán. Ese proceso justo inicia en este filme. La tecnología para asistir a los tributos, el sistema de recompensas, las apuestas, el empatizar con los tributos. Es el espectáculo de la destrucción, de los instintos más bajos y primitivos del ser humano. La emoción que despiertan funciona como escapismo, pero incomoda como espejo. Snow responde a la pregunta de Gaul justo eso. Los juegos del hambre existen para recordar el sentido de sobrevivencia humana. Al jugarlos, Snow ha comprendido la frase que le dice a Katniss en el desenlace de la tetralogía: "Son las cosas que más amamos las que nos destruyen" y la "Balada de pájaros cantores y serpientes" suena melancólica para cantar en honor, en recuerdo, de aquello que ha sido destruido en Snow, aún y cuando "la nieve siempre termine arriba".

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EE. UU. 2023 - 2h 37m

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