Tengo que confesarlo, me dio curiosidad... varios días en el Top 10 de Netflix y el perrito se veía la cosa más linda.
El perrito en cuestión es Travieso, está consentido al máximo, con personal que lo tiene más limpio que un espacio sanitizado en estos tiempos de pandemia, idas al spa y shopping un día sí y el otro también. Cuando su dueña, la acaudalada Sra. Banderwhoozie fallece, Travieso termina por error en un camión con varios afiches que los "herederos" no quieren más, enfrentándolo con un mundo que les es ajeno.
Aceptémoslo, hemos visto antes esta historia, curiosamente en versiones live action. Ahí están "Una chihuahua de Beverly Hills”, "Volviendo a casa, una aventura increíble” o “Mis huellas a casa”. Aún con ello, la realidad es que “Travieso, de la mansión a la calle” funciona bastante bien. Sí, es un tanto predecible, pero tiene suficiente encanto gracias a un Travieso muy simpático, a un grupo de intimidantes ardillas con movimientos al mejor estilo de Broadway y a un “cazador de animales”, Thurman Hunter, que recuerda al Kraven de Spider-Man sin ser intimidante.
Con voces cortesía de Sean Andersen, Lucy Halle y Wilmer Valderrama, “Travieso, de la mansión a la calle”, es un tributo a la nobleza y fidelidad de los perros, a que son el mejor amigo que se puede tener y una metáfora de que el hogar está donde están a quienes amamos y quiénes nos aman.
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"Dog Gone Troube" o "Trouble"
EE. UU. 2021 - 1h 27m
