"Sex Education" está de regreso bajo una promesa: lo desordenado es normal.
Otis (Asa Butterfield) y Maeve (Emma Mackey) reabren su clínica de educación sexual tras un escándalo de clamidia. Paralelo a su labor, la Dra. Milburn (Gillian Anderson) consultará a los estudiantes. Mientras ello sucede, Otis continúa su relación con Ola (Patricia Allison), con quién no puede intimar y eso que ya es bastante asiduo a autocomplacerse. La relación entre Milburn y Jakob (Mikael Persbrandt) tampoco ayuda. Maeve tiene nuevos vecinos y debe decidir qué hacer con su embarazo; Eric (Ncuti Gatwa) ayuda a Adam (Connor Swindells), quién está de regreso, a estar en paz con su sexualidad (es gay); Jackson (Kedar Williams-Stirling) toma medidas desesperadas por librarse de la rutina a la que es sometida en aras de ser un atleta de excelencia y Aimee (Aimee Lou Wood) trata de hacer sentido del abuso del que fue víctima en un autobús.
Qué gran serie es "Sex Education". Si la temporada anterior fue buena, esta es mejor. Habiendo superado los requisitos de la introducción, la serie se da tiempo en ésta de seguir desarrollando a sus protagonistas, pero, más aún, de ampliar el espectro al darle espacio a personajes que apenas habían sido delineados antes. Hay grandes momentos, tratados con mucho tacto y sin que ello demerite el que, al final, esto es entretenimiento.
En especial, es de destacarse el caso del estóico Adam y la gran labor que el guion y Connor Swindells hacen por darle dimensión a quién antes sólo era un bully y detrás de cuya fasada hay un joven intentando hacer sentido entre lo que siente, lo que le enseñaron y lo que cree que debe ser para sobrevivir. También y, quizás todavía aún más relevante, es el caso de Aimee. La serie comienza por tratarlo como algo "casual" o "usual" para poco a poco ir desarrollando el impacto real que tiene un hecho como ese (un hombre que se masturba en un autobús). Igualmente valioso el que "Sex Education" no se limite únicamente a hablar de la vida sexual de los adolescentes, dándole espacio a los adultos, de los cuáles también se le da voz a Mauren Groff (Samantha Spiro), la esposa del director Groff (Alistar Petrie).
"Sex Education" es inteligente, mordaz, creativa, reveladora y muy, muy divertida o qué puede serlo más que la oda espacial en que se convierte "Romeo y Julieta" al recibir el tratamiento musical y sexual al que es sometido y bajo los diseños de la siempre creativa y erótica Lily (Tanya Reynolds). Si lo desornedado es normal, esta temporada es ordenadamente desordena y anormalmente normal.
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EE. UU. 2020 - 8 Episodios de menos de 1 hora
