Nada a mal ritmo, pero la corriente es poderosa.
Millones de sirios viven en refugio alrededor del mundo. Yusra Mardini, nadadora olímpica, es uno de ellos. En 2015 a los 17 años, Yusra (Nathalie Issa) y su hermana Sara (Manal Issa) dejaron Siria tras la Guerra Civil con la esperanza de que con ello pudieran pedir asilo político para toda la familia. Llegar a Berlín les implicó enfrentar varios riesgos en su trayecto por Líbano, Turquía, Grecia y Lesbos hasta que finalmente fueron acogidas como refugiadas en Berlín. Ahí, Yusra, busca retomar su carrera como nadadora y Sara encuentra un nuevo sentido para su vida.
“Las nadadoras” vale como testimonio histórico, político y cultural, dando cuenta de los eventos que llevan a cientos de personas a dejar sus países en conflicto en aras de encontrar un entorno seguro; en este caso, de una familia que envía a dos de sus hijas.
La historia de Yusra y Sara, nadadoras y hoy activistas, tiene más que contar de lo que “Las nadadoras” consigue expresar y no es que no cuente “mucho”, es que no consigue decir algo más allá del recuento de eventos. Ése es su problema.
“Las nadadoras” termina por sentirse cansada pues no establece un conflicto sólido para su protagonista que le permita hablar más allá de los hechos particulares volviéndose universal. Más aún, a su directora, Sally El Hosaini, le falla el construir momentos de tensión cuando quedan varadas en el mar, son dejadas a medio camino en una carreta o deben saltar una malla con navajas. Vaya, hace menos de un año, “Flee”, por dar un ejemplo, una cinta animada, hace un trabajo extraordinario en contar una historia de migración que es al mismo tiempo una metáfora, en ese caso, de la liberación del protagonista. En "Las nadadoras" hay posibilidades para hablar del espíritu humano, de hermandad, de familia...
Un dato que hay que mencionar que las hermanas Mardini son interpretadas por las las actrices Nathalie Issa y Manal Issa, quiénes también son hermanas. La figura de la película es el actor alemán Matthias Schwighöfer, quién hace a Sven, el entrador de Yusra cuando llega a Berlín.
“Las nadadoras”, contrario a su protagonista, flota. La historia de las hermanas Marini, hoy ambas activistas y defensoras de los derechos humanos, es sin duda digna de contarse. Ojalá que “Las nadadoras” hiciera un mejor trabajo en ello, no sólo uno apenas cumplidor, alzando su voz como los personajes de la vida real que retrata.
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EE. UU. / Arabia 2022 - 2h 14m
