"El espía inglés" de Dominic Cooke

Un thriller clásico, bien hecho y basado en una historia real.

Grenville Vynne (Benedict Cumberbetch), un hombre de negocios inglés, fue reclutado durante la Guerra Fría por la MI6 para servir como mensajero (de ahí el título original), aprovechando que su bajo perfil podría evitar sospechas de que estuviera haciendo algo más. Su contacto era Oleg Penkowsky (Merab Ninidze), el oficial soviético de más alto rango en haber brindado información al Reino Unido y de quién se ha dicho fue clave para cambiar el curso de la historia, entre ello dar fin a la Crisis de Misiles en Cuba.

Parece que hay una moda por rescatar historias reales de espías, todavía más aquéllas donde el o los personajes centrales llegaron inesperadamente a serlo como hace poco fue mostrado en "Llamadas a espiar" y como sucede también con "El espía inglés". Dominic Cooke hace una buena labor con el material, dosificándolo adecuadamente y construyendo un retrato de un hombre común, esposo y padre de familia, que se ve envuelto en una situación extraordinaria, que lo sorprende y reta, llevándolo a riesgos inesperados.

Benedict Cumberbatch está espléndido y es gran parte del acierto de un thriller que se cuenta bien, sin necesariamente aportar al género en términos estilísticos o narrativos, pero ejecutando y dando verdad a una receta que funciona bien para entretener, dar luz a una historia poco conocida, reconocer la labor de héroes que en su momento fueron anónimos y dialogar sobre patriotismo y familia.

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Reino Unido / EE. UU. 2020 - 1h 52m