top of page

Y tu mamá también

Foto del escritor: Carlos Andrés MendiolaCarlos Andrés Mendiola
“La vida es como la espuma, hay que entregarse a ella como al mar,” Luisa.

“Y tu mamá también” marca un punto importante en la historia del cine en México: demuestra el valor artístico del cine mexicano (entre otros premios, fue reconocida por Mejor Guion en el Festival de Cine de Venecia y como Mejor Película Extranjera en los Independent Spirit Awards), prueba que el cine nacional puede ser redituable (tan sólo en su primer semana de exhibición hizo más de dos millones en taquilla), confirma a Alfonso Cuarón como un director con voz propia, a Gael García Bernal como una estrella en asenso, y catapulta a Diego Luna como actor internacional. El filme, considerado comercialmente como una película de “adolescentes”, causó revuelo gracias a sus escenas de desnudo y contenido erótico, en especial el beso entre sus protagonistas masculinos. Sin embargo, su trascendencia reside, amén de lo anteriormente dicho, en los múltiples niveles que el guion, coescrito por Cuarón y su hermano Carlos, maneja.

La anécdota central es sencilla. Julio (García Bernal) y Tenoch (Luna) son un par de amigos que deciden aprovechar el viaje de sus novias a Europa para hacer lo propio. El destino es Boca del Cielo, una mítica playa cuya existencia incluso es incierta. Antes de partir, se encuentran con Luisa (Maribel Verdú), la esposa española de un primo lejano, a quien invitan. Inicialmente la mujer lo toma como un momento fruto de las copas, pero después, a causa de una devastadora noticia, decide aceptar. Los tres se embarcan en un viaje que los llevará, literal y metafóricamente, por muy diversas e intrincadas carreteras a un revelador destino.



En la superficie “Y tu mamá también” ofrece lo que parece el típico divertimento de las películas que se anuncian comercialmente igual; el giro, no tan original (ya explotado en la también mexicana “Por la libre”, 2000), parece ser su combinación con el roadtrip. Pero a diferencia de las otras, “Y tu mamá también” decide hacer un retrato realista, alejado de situaciones cómicas gratuitas y centrado en la exploración de sus personajes y el entorno que los rodea. Los niveles en los que se maneja revelan otros, como las muñecas rusas, a medida en que se descubren. A primera vista trata de una historia de crecimiento-maduración de los protagonistas. El trabajo de García Bernal y Luna es impecable y les hizo merecedores del Premio Marcelo Matroiani en el Festival de Venecia. Verdú está a la altura en un papel que sirve como catalizador entre los otros dos. Pero “Y tu mamá también” hace también una radiografía de México, mostrando sus dos caras, representadas por Tenoch y Julio, reveladoras de una verdad mucho más profunda aunque difícil de aceptar, sobretodo, teniendo en cuenta la relación de dos amigos de toda la vida que, sin embargo, pertenecen a estratos sociales distintos y que descubren, conforme avanza el viaje, lo poco que realmente se conocen entre ellos y a sí mismos.


La nominada al Oscar por Mejor Guion Original es una poderosa y estilizada mezcla de agridulces emociones, como lo reconociera el Festival de Cine de la Habana con el premio Fipresci. La delgada línea que cruza, como la coloquial frase que la nombra, es efectiva en su atinado estudio de lo efímero y frágil de la vida... y la difícil, pero decisiva finalidad de la muerte.

México 2001

Director: Alfonso Cuarón.

Reparto: Gael García Bernal, Diego Luna, Maribel Verdú, Diana Bracho.

3 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

Comments


bottom of page