Carlos Andrés Mendiola

1 de ene de 20172 min.

Cómo robar un millón

“¿No sabes que en vida Van Gogh nunca vendió una pintura? Mientras que yo, en memoria a su trágico genio, he vendido ya dos,” Charles Bonnet.

Inicialmente concebida como una continuación obscura de “Roman Holiday” (1953), “Cómo robar un millón” es una sencilla comedia que a pesar de sus desaciertos termina por robar más de una sonrisa al espectador.

Audrey Hepburn es Nicole, la hija del “prestigiado coleccionista” de arte Charles Bonnet (Hugh Griffiths), quien recién ha prestado una escultura para una exhibición. La pieza única en realidad es un fraude (fue hecha por el abuelo). Por ello cuando el museo le informa al Sr. Bonnet que se le harán pruebas como parte del procedimiento del Seguro, el hombre entra en pánico. La venta de piezas ficticias es su modus vivendi; no vende la escultura por la misma razón pero se especializa en pinturas (los Van Gogh’s y Monet’s le salen a la perfección). Para ayudar a su padre, Nicole pide ayuda a Simon Dermott (Peter O’Toole), un “ladrón de sociedad”.

Con un primer acto demasiado largo (cerca de 45 minutos para introducir a los personajes principales y el conflicto), el filme, nominado a Mejor Guión de Comedia por el Sindicato de Guionistas de EE.UU., involucra al espectador gracias al inicial amor-odio que surge entre los personajes principales y a la química entre Hepburn y O’Toole. La primera, como siempre, es encantadora y elegante (su vestuario es de Givenchy, aunque en pro de la causa le dan una noche libre al diseñador). El segundo es un agasajo. O’Toole aprovecha cada momento para desplegar su carisma... simplemente hipnótico, consiguiendo que el público, como Nicole, quiera saber tanto si conseguirá robar la pieza del museo como el corazón de la joven.

“Cómo robar un millón” es una agradable comedia de situaciones que asegura un muy buen rato, máxime si se es admirador de sus protagonistas. Las primeras notas podrán indicar que quizá no se trate de una auténtica obra arte, pero conforme se le mira con detenimiento se le toma el gusto. No es como robar un millón pero sí suficientemente hábil como para robar un lugarcito en la memoria del espectador.

How to Steal a Million

EE.UU. 1966

Director: William Wilder.

Reparto: Audrey Hepburn, Peter O’Toole, Eli Wallach, Hugh Griffiths.

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